Estación Quilmes: 03/01/2011 - 04/01/2011

  Liliana Ancalao

30 de marzo de 2011




Lluvia – Mawün
las mujeres y la lluvia


cuando niñas vamos sueltas por el patio
y el sol nos persigue de a caballo
pero la luna implacable nos va dejando sus mareas
hasta que nos desvela
y esa noche encontramos
un cántaro
en lugar de la cintura

aprendices de machi las mujeres
nacemos así al rocío
listas para mirar los barcos que se pierden
descalzas a la neblina antes de que amanezca
nervaduras de lluvia nuestras manos
levantadas al cielo

te salpicará el amor
parirás sin amarras
y recibirás con ojos arrasados
la visita intermitente de la risa
permanecerá la llovizna en tu vientre
porque no te atreverás a ser la madre
de todos los desamparos
que andan por la calle

caudal desubicado te desarmará
en pájaros que no saben hablar
a borbotones no podrás decir
lo que quisieras
mejor dejarlo que se derrame despacio
decir
permiso tengo lluvia y alejarse
a una altura al mar al cielo
hasta que vuelvan a apretarse los musgos
en las profundidades

yo conozco mujeres que nunca se alejan

le abren la compuerta a sus gorriones
y lloran
enjuagan el trapo mojado lo estrujan
limpian con él la tabla
pican cebollas
igual hacen las camas
barren la casa peinan a los chicos
igual lavan
dónde aprendieron
hay otras que se pasan la vida domesticando
a sus pájaros
porque no quieren que irrumpan sin aviso
y los beba el enemigo
guardan su sangre su ausencia quietos en el fondo
y apuntan con palabras nítidas de cuarzo
que van a dar al blanco

yo a las palabras las pienso
y las rescato del moho que me enturbia
cada vez puedo salvar menos
y las protejo
son la leña prendida de Atahualpa
que quisiera entregar a esas mujeres
las derramadas las que atan sus pájaros
una vez en febrero yo estaba ahí
en el campo
y se llovía todo
parecía la furia de cai cai sobre nosotros
el agua estaba helada
las ancianas prosiguieron el ritual
y tuve que quedarme
hasta cuándo aguantaremos
pará la lluvia dios es demasiada
no la bebe la tierra se atraganta
y somos casi nada
trazos de tiza borrados por el agua

después de unos siglos el sol abrió las nubes
la voz gastada de meridiana epulef
levantó el taill del cauelo

pensé que dios podía ser ese arco iris
o los caballos en fila
moro zaino pangaré tostado bayo
saludando al horizonte despejado

huele tan bien la tierra después del aguacero



Liliana Ancalao
Argentina – 1961

De "mamihlapinatapai" Poesía de mujeres mapuche, selknam y yámana -
Compilador: Cristian Aliaga
Ed. Desde la gente - 2010

Poeta, escritora y educadora nacida en Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut. Profesora de Letras, integra el grupo universitario de investigación de mapuzungun -idioma originario mapuche- y da talleres de enseñanza del mismo. Integra la comunidad mapuche-tehuelche Ñankulawen. Coordinadora de talleres literarios, también es organizadora de recitales de música y poesía con el grupo Arte Popular en los Barrios. Su poética, de un profundo conocimiento del alma mapuche, es una voz reinvidicativa de la lucha de los pueblos originarios.
Es autora del poemario: "Tejido con lana cruda" (2001) e “Inchiú” (2006, Campaña Nacional de Lectura). Su obra ha sido incluida en las antologías: “Taller de escritores: lenguas indígenas de América” (1997, Temuco, Chile) y “La memoria iluminada. Poesía mapuche contemporánea” (2007, Málaga, España)

  Carlos Patiño

28 de marzo de 2011




Breve teoría sobre suicidios básicos

"Hechas de piedra que se desmorona
y de pluma que se desparrama
hechas de espinas hechas de lino
de alcohol de
espumas de risas de llantos de tormentos ridículos
hechas de carne y ojos sin duda verdaderas"

Paul Eluard


Cuando el viejo Ernest Hemingway apretó la escopeta
contra su vida
hubo mucha gente que no sabía por qué/
yo no supe por qué/
pensé mucho en el dedo reseco
de Ernest Hemingway/ en ese gesto/ el último/
aferrado al gatillo que volaría campanas/ monasterios/
mares/ montañas/ cóleras/ burladeros/
pero ahora sospecho que ese dedo tremante y decidido
sólo quería salvar trozos de dignidad
sacrificados
en altares que ya no admitían sus ofrendas

Hemingway seguramente amaba
ese gesto dulce de la mujer dispuesta
ese girar la cabeza de una manera eterna
o ese cruzar las piernas de modo que se diría las abre
como si dejara encendidas las luces del pasillo
que lleva hasta su cama.

Pienso que el viejo Hemingway
entreveía/ con sus ojos eternos de ron y latitudes/
mujeres cruzando piernas delante suyo
simplemente cruzándolas
sin encender sus luces de pasillo/
por eso
en el dedo asumido sobre el percutor de la escopeta
con que Ernest Hemingway dijo hasta aquí
sospecho
habría no sólo ruinas de su propio cuerpo sino
un enjambre de mujeres hermosas
con sus piernas cruzadas/ sus luces encendidas/
invitándolo llamándolo desde ayeres perdidos
y por eso el viejo Hemingway
acostumbrado a poner en acciones sus
sentimientos
ordenó a su dedo hiciera.

En la bala viajera hasta el
fastidio del viejo Hemingway
montarían millones de mujeres que ya/ para él/
jamás ladearían la cabeza con su gesto eterno/ mujeres
que apenas rozarían su barba con labios secos
y cuyas manos tan sólo servirían para decir “hola”
o mejor “adiós”/
manos que ya no esconderían números de teléfonos
o de habitaciones.

Creo que fue allí cuando el dedo rugoso de
Ernest Hemingway
se deslizó hacia atrás


Carlos Patiño
Argentino – 1934

De: “Scalam”
Ed. El ojo de la ballena – 2006

Miembro del Grupo Barrilete. Debió radicarse en México en 1976 donde realizó una amplia tarea en el periodismo y en la cultura.
Dirigió talleres literarios de donde surgieron docenas de escritores de la mejor madera.
Premio Casa de las Américas, Cuba 1990.
Obras publicadas: Buenos Aires por la cabeza, Hombres de doce menos cuarto, Retratos, Jaque a la dama, Ceremonias (y otros desórdenes), Esquinas silenciosas, Murciélagos, Manuales del sobreviviente, Alrededores del enigma, Manantial en llamas, Selección poética 1975-2002, Buscados (pero no hay recompensa), Scalam.
En el 2004 fue publicada su novela La Pallamay (la indescifrable estrella de los indios Quilmes)

  Blanca Varela

26 de marzo de 2011




curriculum vitae

digamos que ganaste la carrera
y que el premio
era otra carrera
que no bebiste el vino de la victoria
sino tu propia sal
que jamás escuchaste vítores
sino ladridos de perros
y que tu sombra
tu propia sombra
fue tu única
y desleal competidora.



canto villano

y de pronto la vida
en mi plato de pobre
un magro trozo de celeste cerdo
aquí en mi plato

observarme
observarte
o matar una mosca sin malicia
aniquilar la luz
o hacerla

hacerla
como quien abre los ojos y elige
un cielo rebosante
en el plato vacío

rubens cebollas lágrimas
más rubens más cebollas
más lágrimas

tantas historias
negros indigeribles milagros
y la estrella de oriente

emparedada
y el hueso del amor
tan roído y tan duro
brillando en otro plato

este hambre propio
existe
es la gana del alma
que es el cuerpo

es la rosa de grasa
que envejece
en su cielo de carne

mea culpa ojo turbio
mea culpa negro bocado
mea culpa divina náusea

no hay otro aquí
en este plato vacío
sino yo
devorando mis ojos
y los tuyos



Blanca Varela
Perú (1926 – 2009)

Blanca Leonor Varela Gonzáles es considerada como una de las voces poéticas más importantes en América Latina. Se inició en la poesía en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de la capital peruana, donde ingresó en 1943 para estudiar Letras y Educación.
Obtuvo el Premio Octavio Paz de Poesía y Ensayo en el año 2001.
En octubre de 2006 se convirtió en la primera mujer que gana el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Granada Federico García Lorca.
Durante la ceremonia de entrega del premio antes mencionado, el 10 de mayo de 2007, en el palacete del Ayuntamiento de Granada, se anuncia que Blanca Varela gana la XVI edición del Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, convocado conjuntamente por el Patrimonio Nacional de España y la Universidad de Salamanca.
Obra publicada: “Ese puerto existe”. 1959; “Luz de día” (poemario) 1963; “Valses y otras falsas confesiones”. 1971; “Ejercicios materiales”; “El libro de barro”. 1993; “Concierto animal”; “Canto Villano”. (Su primera recopilación fundamental) 1978
“Como Dios en la nada”. Antología de 1949 a 1988; “Donde todo termina abre las alas”. (Poesía reunida) 1949 - 2000; “El falso teclado”. 2001

  José Martí

24 de marzo de 2011




El arte de pelear


Se pelea cuando se dice la verdad. Se pelea cuando se fuerza al enemigo, por el miedo del poder que ve venirse encima, a los extremos y desembolsos que han de precipitar la acción que deseamos. Se pelea cuando se organizan las fuerzas para la victoria. Se pelea cuando se demora el pelear hasta que los ejércitos estén en condición de aspirar a vencer. Se pelea cuando se atrae los ánimos hostiles por la demostración de la unidad donde sospechan el desorden, de la cordura donde sospechan la impaciencia, de la cordialidad donde sospechan la enemistad, de la virtud donde se propalaba que no había más que vicio y crimen. Se pelea, sobre todo, cuando los que han estado limpiando las armas y aprendiendo el paso en los ejercicios parciales e invisibles, en organización aisladas y calladas, se ponen, a la vez, en pie, con un solo ánimo y un solo fin, cada uno con su estandarte y con su emblema, y todos, a la luz en marcha que se sienta y que se vea, detrás de la bandera de la patria.
Se pierde una batalla con cada día que pasa en la inacción. Se pierde una batalla cuando no se guía inmediatamente al ataque la fe que cuesta tanto levantar. Se pierde una batalla cuando los ejércitos, a la hora de concentrarse, se entretienen en el camino, y llegan tarde, y con las fuerzas desmayadas, al punto de concentración. Se pierde una batalla cuando en el momento que exige mano rápida y grandiosa en los jefes, y mucho brazo y mucho corazón para la arremetida, tarda en vérsele a los jefes la mano rápida, y se da tiempo a que se desordenen los corazones. Se pierde una batalla cuando, a la hora del genio, y de la centella, se monta a caballo en el taburete de cuero y se abre la ocasión al enemigo.




José Martí
Cuba (1853 – 1895)

De: “La literatura de ideas en América Latina”
Ed. Colihue – 2004

Artículo publicado el 19 de Marzo de 1892 mientras estaba exiliado en Nueva York. Funda el Partido Revolucionario Cubano y edita la revista “Patria”, su órgano de difusión, desde donde convoca a los cubanos a la lucha a través de artículos de diversa índole. Este texto pertenece a esa publicación.

  Carlos Drummond de Andrade

23 de marzo de 2011




Busca de la poesía


No hagas versos sobre acontecimientos.
No hay creación ni muerte ante la poesía.
Frente a ella la vida es un solo estático,
no calienta ni ilumina.
Las afinidades, los aniversarios, los incidentes personales no cuentan.
No hagas poesía con el cuerpo,
ese excelente, completo y confortable cuerpo, tan enemigo de la efusión lírica.
Tu gota de bilis, tu máscara de gozo o de dolor en lo oscuro son indiferentes.
Ni me reveles tus sentimientos,
que se prevalecen del equívoco y tientan el largo viaje.
Lo que piensas o sientes, eso aún no es poesía.

No cantes a tu ciudad, déjala en paz.
El canto no es el movimiento de las máquinas ni el secreto de las casas.
No es la música oída de paso; rumor del mar en las calles junto a la línea de espuma.
El canto no es la naturaleza
ni los hombres en sociedad.
Para él, lluvia y noche, fatiga y esperanza, nada significan.
La poesía (no extraigas poesía de las cosas)
elude sujeto y objeto.

No dramatices, no invoques,
no indagues. No pierdas tiempo en mentir.
No te aborrezcas.
Tu yate de marfil, tu zapato de diamante,
vuestras mazurcas y supersticiones, vuestros esqueletos de familia,
desaparecen en la curva del tiempo, son inservibles.

No recompongas
tu sepultada y melancólica infancia.
No osciles entre el espejo y la
memoria en disipación.
Que se disipó, no era poesía.
Que se partió, cristal no era.

Penetra sordamente en el reino de las palabras.
Allá están los poemas que esperan ser escritos.
Están paralizados, mas no hay desesperación,
hay calma y frescura en la superficie intacta.
Helos allí solos y mudos, en estado de diccionario.
Convive con tus poemas, antes de escribirlos.
Ten paciencia, si oscuros. Calma, si te provocan.

Espera que cada uno se realice y consuma
con su poder de palabra
y su poder de silencio.
No fuerces al poema a desprenderse del limbo.
No recojas en el suelo el poema que se perdió.
No adules al poema. Acéptalo
como él aceptará su forma definitiva y concretada
en el espacio.

Acércate y contempla las palabras.
Cada una
tiene mil fases secretas sobre la neutra faz
y te pregunta, sin interés por la respuesta,
pobre o terrible, que le des:
¿Trajiste la llave?

Repara:
yermas de melodía y de concepto,
ellas se refugian en la noche, las palabras.
Aún húmedas e impregnadas de sueño
rolan en un río difícil y se transforman en desprecio.



Carlos Drummond de Andrade
Brasil (1902 – 1987)

Fue poeta, periodista y político brasileño. A los 23 años edita junto a otros escritores La Revista, cuyo objeto era dar difusión a las expresiones del "modernismo brasileño", movimiento que tiene su inicio durante la Semana de Arte Moderna realizada en São Paulo durante 1922.
En 1925 Andrade ingresó en la Facultad de Farmacia, se graduó aunque nunca llegó a ejercer su profesión.
Ejerció en su país primero y luego en el mundo la representación de los altos valores del modernismo de Brasil (nacionalismo no dogmático, empatía con el pueblo, creatividad no académica y libertad total a la palabra). En su momento no tembló su conciencia al renunciar a un importantísimo premio nacional que iba acompañado de una gran cantidad de dinero ya que éste era otorgado por el entonces gobierno militar de su país.
Publicó en 1930 su primer trabajo poético bajo el nombre de "Alguma poesia", seguido entre otros de "Sentimento do Mundo" en 1940, "Dopo A rosa do povo" en 1945, y "Viola de Bolso" en 1955. Posteriormente exploró el verso experimental y la sátira con "Boitempo" en 1968, y su propia biografía en 1985.

  Federico García Lorca

21 de marzo de 2011




Ciudad sin sueño (Nocturno del Brooklyn Bridge)


No duerme nadie por el cielo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
Las criaturas de la luna huelen y rondan sus cabañas.
Vendrán las iguanas vivas a morder a los hombres que no sueñan
y el que huye con el corazón roto encontrará por las esquinas
al increíble cocodrilo quieto bajo la tierna protesta de los astros.

No duerme nadie por el mundo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
Hay un muerto en el cementerio más lejano
que se queja tres años
porque tiene un paisaje seco en la rodilla;
y el niño que enterraron esta mañana lloraba tanto
que hubo necesidad de llamar a los perros para que callase.

No es sueño la vida. ¡Alerta! ¡Alerta! ¡Alerta!
Nos caemos por las escaleras para comer la tierra húmeda
o subimos al filo de la nieve con el coro de las dalias muertas.
Pero no hay olvido, ni sueño:
carne viva. Los besos atan las bocas
en una maraña de venas recientes
y al que le duele su dolor le dolerá sin descanso
y al que teme la muerte la llevará sobre sus hombros.

Un día
los caballos vivirán en las tabernas
y las hormigas furiosas
atacarán los cielos amarillos que se refugian en los ojos de las vacas.

Otro día
veremos la resurrección de las mariposas disecadas
y aún andando por un paisaje de esponjas grises y barcos mudos
veremos brillar nuestro anillo y manar rosas de nuestra lengua.
¡Alerta! ¡Alerta! ¡Alerta!
A los que guardan todavía huellas de zarpa y aguacero,
a aquel muchacho que llora porque no sabe la invención del puente
o a aquel muerto que ya no tiene más que la cabeza y un zapato,
hay que llevarlos al muro donde iguanas y sierpes esperan,
donde espera la dentadura del oso,
donde espera la mano momificada del niño
y la piel del camello se eriza con un violento escalofrío azul.

No duerme nadie por el cielo. Nadie, nadie.
No duerme nadie.
Pero si alguien cierra los ojos,
¡azotadlo, hijos míos, azotadlo!
Haya un panorama de ojos abiertos
y amargas llagas encendidas.
No duerme nadie por el mundo. Nadie, nadie.
Ya lo he dicho.
No duerme nadie.
Pero si alguien tiene por la noche exceso de musgo en las sienes,
abrid los escotillones para que vea bajo la luna
las copas falsas, el veneno y la calavera de los teatros.

Federico García Lorca
España (1898 – 1936)


De: “Poeta en Nueva York” (1929-1930)


Nació en Fuente Vaqueros, Granada, el 5 de junio de 1898.
Poeta, músico, dramaturgo, ensayista, pintor, conferenciante, artista sobre todas las cosas...
Perteneció a la llamada "Generación del 27", compuesta, entre otros, por Rafael Alberti, Gerardo Diego, Luis Cernuda, Jorge Guillén, Dámaso Alonso, Pedro Salinas, Vicente Alexaindre con quienes compartió amistad e inquietudes artísticas.
Su reputación descansa principalmente en las tres tragedias populares: "Bodas de Sangre", "Yerma" y "La casa de Bernarda Alba".
Federico siempre estuvo a favor del desprotegido: "Creo que el hecho de ser de Granada me inclina siempre a la comprensión simpática del perseguido.
Del gitano, del negro, del judío, del morisco que todos llevamos dentro"- decía.
Sus posiciones antifascistas y su fama lo convirtieron en una víctima fatal de la Guerra Civil española, en Granada, donde lo fusilaron, en agosto de 1936.

  Oscar Hahn

19 de marzo de 2011




Televidente

Aquí estoy otra vez de vuelta
en mi cuarto de Iowa City
tomo a sorbos mi plato de sopa Campbell
frente al televisor apagado
la pantalla refleja la imagen
de la cuchara entrando en mi boca
Y soy el aviso comercial de mí mismo
que anuncia nada a nadie.



Sábana de arriba

Me instalé cuidadosamente doblado
entre la ropa blanca del closet
Sacaste las sábanas de tu cama
y me pusiste de sábana de arriba

Te deslizaste debajo de las tapas
y te cubrí centímetro a centímetro

Entonces fuimos barridos por el huracán
y caímos jadeando en el ojo de la tormenta

Ahora yaces bañada en transpiración
con la vista perdida en el cielo raso

y la sábana de arriba aún enredada entre las piernas.



Oscar Hahn
Chile – 1938

Nació en la ciudad de Iquique, Chile.
Reconocido como uno de los escritores de la Generación del 60' en Chile, también llamada Generación Trilce.
En 1959 obtuvo el Premio Poesía de la Federación de Estudiantes de Chile. El año 1961 obtuvo el Premio Alerce de la Sociedad de Escritores de Chile por la obra Esta rosa negra. En 1967 obtuvo el Premio Único del Primer Certamen Zonal de Poesía Nortina de la Universidad de Chile, ex sede Antofagasta.
Estudió y ejerció la carrera de Pedagogía en Literatura en la Universidad de Chile, sede Arica. En 1972 obtuvo el grado de Master of Arts en la Universidad de Iowa. Volvió a Chile, donde ejerció el cargo de docente en la Universidad de Chile sede Arica. Posteriormente fue detenido el 11 de septiembre de 1973, razón que lo obligó a buscar nuevos horizontes tras encontrarse cesante diez días después, cuando fue puesto en libertad.
En 1974 se radicó en Estados Unidos. Es miembro de la Academia Chilena de la Lengua.
El 31 de mayo de 2006, el Jurado Calificador integrado por José Manuel Caballero, Luis García, Jesús García, Benjamín Prado, Imma Turbau y Anna María Rodríguez-Arias, le concedió Hahn el VI Premio Casa de América de Poesía Americana , por su obra En un abrir y cerrar de ojos.
La obra de Óscar Hahn se encuentra compilada en las siguientes publicaciones: “Esta rosa negra”, 1961; “Suma poética”, 1965; “Agua final”, 1967; “Arte de morir”, 1977; “Mal de amor”, 1981; “Imágenes nucleares”, 1983; “Flor de enamorados”, 1987; “Estrellas fijas en un cielo blanco”, 1989; “Tratado de sortilegios”, 1992; “Versos robados”, 1995; “Antología virtual”, 1996; “Poemas de amor”, 2001; “Apariciones profanas”, 2001; “Obras selectas”, 2003; “Sin cuenta poemas”, 2005; “Obra poética”, 2006; “En un abrir y cerrar de ojos”, 2006; “Archivo expiatorio”, 2007; “Hotel de las nostalgias, antología”, (Lima: Lustra editores, 2007); “Poemas sin fronteras, Antología”, (Santiago: Editorial Pfeiffer, Colección 33, 2010).

  Francisco Madariaga

17 de marzo de 2011




Lágrimas de un mono

Yo quiero cautivar tu desesperación, oh mono adiós.
Tiemblas tanto en tus islas negras, oh mono adiós.
En los embarcaderos el color encendido en tus ojos tiene tanta fe.
Ah mono, retén el equilibrio de tu asombro.
Yo ya tiemblo en tus islas, mono adiós.
Tu odio virginal es idéntico a cuando se cruza mi alma con el mundo.



El viaje del lobo

Un lobo transporta un pedazo de amor muerto,
lleva en uno de sus ojos acostada también a la amada.
¿Será porque cuando es tarde ella se pudre también en lo estático?
¿o porque el viaje es tiernamente bello en los ojos del lobo?
Ah, lobo, sentado como un señor de ojos de fuego en la berlina,
corrompe con tus pupilas la espalda jorobada del postillón que babea.
Una bella santa y bárbara en la colina despide a una idea,
con los caballos del recuerdo arranca hacia la perfección de la tierra,
las ruedas giran dirigidas por la caridad de estos seres de infierno.
Postillón, oh hermano de su casa, ah perro que boquea la peste del desamor entre sollozos.
Ah lobo de pecho raso, dirígelos con la ternura de tus dientes.
La criatura ha combatido todo el año con sus vestidos que se pudren.



Francisco Madariaga
Argentino (1927 – 2000)


De: “Criollo del Universo y otros poemas”
Selección: Daniel Freidemberg
Colección: Los grandes poetas – Nº 44
CEAL – 1988

Foto: extraída del blog franciscomadariaga.blogspot.com


Nació el 9 de septiembre de 1927. Algunos de sus poemas han sido publicados en antologías del exterior, traducidos al alemán, sueco, inglés, portugués e italiano. Colaboró desde joven en revistas de su país y del exterior (como Clarín y La Nación, de Buenos Aires, y diarios del interior), en revistas del exterior (como Cuadernos Hispanoamericanos, Madrid, Eco, Bogotá, Zona Franca, Caracas, Periódico de Poesía de la Universidad Nacional Autónoma de México), en los diarios El Universal y El Nacional de Caracas, El Espectador de Bogotá, Presencia de Bolivia, etc.). Libros publicados: “El Pequeño Patíbulo” (Ed. Letra y Línea – 1954); “Las jaulas del sol” (Ed. A partir de Cero- 1959/60); 1963 “El delito natal” (Ed. Sudamericana- 1963); “Los terrores de la suerte” (Ed. Biblioteca, Rosario - 1967); “El asaltante veraniego” (ED. del Mediodía - 1968); “Tembladerales de oro” (Ed. Interlínea, 1973). Reeditado con introducción de Víctor Redondo por El Buho Ediciones, Rosario, 1985; “Aguatrino” (Ed. Edición del Poeta - 1976); “Llegada de un jaguar a la tranquera” ( Ed. Botella al Mar- 1980); “Poemas” (Autoselección, publicada por Ed. Fundarte- Caracas – Venezuela – 1983); “La balsa mariposa” (Primera Obra Reunida, editada por la Municipalidad de la ciudad de Corrientes - 1982); “Una acuarela móvil” (Ed. El imaginero, Buenos Aires - 1985); “Resplandor de mis bárbaras” (Ed. Tierra Firme -1985); “El tren casi fluvial” (Obra Reunida, editada por el Fondo de Cultura Económica de México en Buenos Aires - 1988); “País Garza Real2 (Ed. Argonauta – 1997); “Aroma de apariciones” (Ed. Último Reino - 1998).

  Dolores Etchecopar

15 de marzo de 2011




Antes de morir las pequeñas flores rugen sobre el sol

es de noche
y nadie pudo calmar las mesas de la infancia
el vetusto rey me aconseja susurra
en mi máscara de prisionera
¿debo perder una vida llevando
tan decoroso susurro
a las villas de emergencia?
no debo (risotada)
si debo (vociferaciones)
no debo (vagidos)
sí mi furioso sol en el plumaje
rompe esas puertas tan cerradas tan avaras
es de noche
dulces piernas manos descarriadas
hacen brillar el sexo del mar
(mis muslos rasgados por la gota
que extraes para desnudarme)
casi todos los puentes son mudos
los zapatos rojos y el pelo alcohólico
de mi caballo en la fiesta del alba
en la fiesta del alba de mi sed
y mi boca contra el suelo
contra un montón de suelos)
en mi estola de risas se hamaca el infierno
espero al pirata de las flores
con un aro de agua en la pierna
para él y sus odios y sus rameras apostadas
en las barandillas del fin del mundo
es de noche
vuelve el changador de cadáveres
con el vidrio roto de la luna en un labio
es de noche
volaré por tu boca
por tu veloz noche huérfana
volaré


Dolores Etchecopar
Argentina – 1956

De: “Notas Salvajes”
Ed. Argonauta – 1989

Obra: Carlos Nine

  Eliseo Diego

13 de marzo de 2011




Elegía para un partido de ajedrez

a José Lezama Lima


En el crepúsculo, si estás
de veras solo, mira,
lo que se dice solo, vienen,
poquito a poco en torno tuyo,
levísimos fantasmas, tus recuerdos.

José riéndose, su vaso
junto a la sapientísima nariz
capaz de discernir
el olor de lo eterno
en el breve grosor de la cerveza.

José -José riéndose.

Una partida de ajedrez,
jugada por nosotros dos,
ha de quedar, no piensa usted,
siempre honorablemente a tablas,
dice José, riéndose entre la espuma.

La brisa en las arecas, y el cristal
tan firme y frío de la mesa,
y en torno los demás, los entrañables
-refugio, abrigo nuestro.

Ni arecas ni cristal, José
se acabó la cerveza.
Solo su risa oculta permanece
como un farol iluminado
las piezas, el vitral
de blancura y negror. ¡Ah, tablas,
mi querido José! Pero su risa, sí,
me tumba el rey definitivamente.

Arrecia el viento en las arecas, mira,
y a solas yo -lo que se dice a solas.



Eliseo Diego
Cuba (1920 – 1994)

De: “Obra Poética”
Ed. Letras Cubanas - 2001

  Roberto Juarroz

11 de marzo de 2011




Poesía Vertical, 22


No. Hoy no quiero hablar de la muerte.

Quiero sencillamente decir algo
de un camino por debajo del agua,
de un ciego cuya ceguera crece
y de una mano callosa
en mi mano extrañamente desnuda.

Quiero mirar a los ojos de los peces
y el lugar de tu sueño,
cuando des vuelta a la cabeza dormida.

No. Hoy no quiero hablar de la muerte,
aunque la muerte coleccione encuentros.

Ella juega al escondite con el hombre
y hoy yo quiero jugar a abrir la puerta.



Roberto Juarroz
Argentina (1925 – 1995)

De: “Las flores de la dicha” – Antología de la poesía alegre
Ed. Planeta - 2003

Obra: Puertas abiertas al campo de Mariano Ibeas

  Jaime Sabines

9 de marzo de 2011




En este pueblo

En este pueblo, Tarumba,
miro a todas las gentes todos los días.
Somos una familia de grillos.
Me canso.
Todo lo sé, lo adivino, lo siento.
Conozco los matrimonios, los adulterios,
las muertes.
Sé cuándo el poeta grillo quiere cantar,
cuándo bajan los zopilotes al mercado,
cuándo me voy a morir yo.
Sé quiénes, a qué horas, cómo lo hacen,
curarse en las cantinas,
besarse en los cines,
menstruar,
llorar, dormir, lavarse las manos.
Lo único que no sé es cuándo nos iremos,
Tarumba, por un subterráneo,
al mar.


Jaime Sabines
México (1926 -1999)


De: “Tarumba” – 1956

  Jacqueline Caniguan

7 de marzo de 2011




Así cantó Margarita Caniguan cuando la invitaron a Santiago,
la Capital de Chile

(16 de noviembre de 1996)


No iré, no iré,
No iré, no iré.
¿Cómo dejar mi patio abandonado?
Andaré sufriendo tal vez,
En una tierra que no es mía,
Una patria que no es mía,

En la ciudad se marea mi cabeza,
En la ciudad se pierden mis pensares,
Ahora no valgo nada,
Ahora no parezco gente,
Ahora no vale mi pensamiento.




Euskal Herría


En Euskal Herría estoy,
Donde la gente habla euskera,
En las calles, en los cerros y las montañas.
Sueñan los euskaldunes,
Diciendo “diez veces venceremos”
Diez veces venceremos gritan,
Porque todavía estamos vivos.

Cantaremos un cantito,
Cantaremos un cantito,
Una gran canción cantaremos.
Todavía vive,
Todavía canta,
Nuestros sueños,
Nuestro hablar.



Jacqueline Caniguan
Chile – 1970

De: “mamihlapinatapai”
Poesía de Mujeres Mapuche, Selknam y Yámana.
Ed. Desde la Gente – 2010

Nació en 1970 en Puerto Saavedra (IX Región, Chile). Publicó: “Petunkun” (2000). Ha participado de numerosas antologías en su país y en España. Es Profesora de Estado en castellano en su país y Magíster en Lingüística por la Universidad Autónoma de México.

  Javier Villafañe

5 de marzo de 2011



Domingo en el zoológico

- Un globo, un globo, quiero un globo
- pidió un niño.
La madre le compró un globo.
El niño soltó el globo y lo vio volar.
- Un globo, un globo, quiero un globo
- volvió a pedir el niño.
El padre le compró un globo.
El niño soltó el globo y lo vio volar.
- Un globo, un globo, quiero un globo
- pidió otro niño.
La madre dijo:
- No.
El padre dijo:
- No.
Y el niño voló
se fue de los brazos de la madre
de los brazos del padre
volando con los globos.
Esto pasó en el Jardín Zoológico
la tarde de un domingo.
Son testigos: un elefante
dos leones
un águila
y un vendedor de globos.




Javier Villafañe
Argentino (1909 – 1996)

De: Javier Villafañe – Antología Personal
Ed. desde la Gente – 1993

  Joan Brossa

3 de marzo de 2011




A todos

Me empolvo la cara con la borla. Con
lápiz oscuro indico el fondo de las arrugas y con lápiz
blanco la parte que sale más. Me pinto las cejas muy
negras y los labios rojos. Me doy unos toques de almáciga
y me engancho los bigotes.

Me arranco los bigotes de crepé. Me borro el negro de las
cejas, el rojo de los labios y las rayas que marcan
las arrugas. Me unto la cara con vaselina hasta dejarla bien limpia.

Sobre la mesa, la peluca y las patillas junto
con un montón de libros.



Joan Brossa
España (1919 – 1998)

En: “Poesía Contemporánea” Ed. Bonsái – 2009

Versión de Andrés Sánchez Robayna


Poeta, dramaturgo y artista plástico español nacido en Barcelona. Inició la producción poética con la obra "Tercera División". Además de la poesía, abarcó otras facetas del arte, como el cine, el teatro y la música.
Fue uno de los fundadores de la revista Dau al Set en 1948 y uno de los principales introductores de la poesía visual en la literatura catalana.
Premio Nacional de Artes Plásticas en 1992, Premio Nacional de Teatro 1998 y la Medalla Picasso de la UNESCO. Fue Miembro i Socio de Honor de la Associació d'Escriptors en Llengua Catalana.

  Frank Báez

1 de marzo de 2011




Después de dos meses sin escribir poesía

Un día de estos serás cadáver
y no podrás escribir más poemas
pero mientras tanto siéntate y espera,
escribe y espera y escribe pensando
que este es el último poema.
Robert Frost cuenta del camino que tomó en un poema sabiendo que
todos
los senderos conducen al mismo bosque y que en este caso el bosque
es la metáfora de la muerte a la que nos dirigimos como Hansel y
Gretel
dejando migas de pan para volver a casa
así los poetas dejan sus poemas
aunque los pájaros se coman las migas de pan
y los editores ya no publiquen poetas.


Frank Báez
Santo Domingo, República Dominicana, 1978) es editor de la revista Ping Pong
Ha publicado los libros de poesía: Jarrón y Otros Poemas (Editorial Betania, Madrid, 2004), y Postales (Casa de Poesía, Costa Rica, 2008); y el libro de cuentos: Págales tú a los psicoanalistas (Editorial Nacional, Santo Domingo, 2007). Con el libro Postales ganó el Premio Nacional de Poesía en el 2009.