30 de octubre de 2015
Se hace por lo verde. Por necesidad.
Se hace porque todo es un parque con animales y pájaros.
Muchos más de los que vuelan y se escapan para siempre
sin ser contados, ni amados, ni comidos.
Se hace por eso, por todo lo volado, lo que vendrá,
por los vecinos.
Se sabe siempre que es el verde lo que descansa y uno
escribe por lo que lee, por lo que mira en el verde
y lo que se transparenta del papel en la tierra.
Uno escribe por lo que lee a la caída de agua sobre el
césped. Se lee en la extensión de lo regado, de lo sagrado,
de lo que crece. Es por el error del arco sobre la superficie
de los pastizales y de lo parejo. De lo parejo sin sobra,
ni yuyos, solo con luz y sombra de la noche.
Una muerte verde es ideal y en la noche donde nadie vuela.
CON LAS PATRIAS DE ADENTRO
Como esos últimos caballos de un ejército
mal cansado
sobre el vendaval y su gesta
regreso nuevamente
sobre la mañana y la República
con los justos y los fuertes
cabalgando en los desiertos de una pampa
con salvajes adorados por el silbo de los pájaros
sobre las alambradas
y el resplandor de esqueletos esperando en la oscuridad.
Volveremos otra vez a la llanura
a los nuestros
a los que vigilan los montes, rodean las ciudades
y las autopistas.
Se sienten en los ruidos y en la calma,
en la vuelta del devorado
en los siglos.
Todo es una modernidad inconclusa, una alambrada
sobre rutas finales.
Montamos otra vez,
para volver al cuchillo
a los malones.
Juano Villafañe
De "Públicos y privados" [EPUB] - Editora Melón (2013)
Nació en Quito, Ecuador, en 1952 y desde 1955 vive en Buenos Aires poeta, periodista y gestor cultural.