Estación Quilmes

  Mónica Cussotti

30 de agosto de 2010




“Otra vieja, vieja palabra de esas que hay que lavar a fondo”
Julio Cortázar


A esas palabras viejas...

A esas palabra viejas,
sentenciosas
voy a lavarles la boca bien a fondo
para lograr que callen

No les daré el derecho a que me digan
cómo hacer ciertas cosas

Sin otorgar franquicias
sin abrir sucursales...

Si obtengo el monopolio de mi vida
podré ejercer al fin
mi total desgobierno.


Mónica Cussotti
Quilmes - Argentina

Escribo, por el simple motivo de estar hecha de palabras.
Carlos Patiño, me enseñó el modo y lo que pude, aprendí.
Lo demás: Magia, magia, magia…

  Germán Arens

29 de agosto de 2010




Vecinos

Ayer…
(no daré datos precisos en relación a Waimann,
dejo situado el ayer en algún lugar de mi tiempo)
ví a Waimann
esperando
a la muerte
en su puerta
de calle.

Lo sé
muerto
desde hace
cuatro meses,
predestinación
de su médico.

Ayer
ví a Waimann
esperando
a la muerte…
y hoy
Waimann
está muerto
está muerto
está muerto.

Ayer…
además de
a Waimann
esperando
a la muerte
en su puerta
de calle
ví a Alberto…
volvía satisfecho
del gimnasio…
y ayer,
además de
a Waimann
en su puerta
de calle
esperando
a la muerte,
al momento
en que Alberto
satisfecho
volvía del gimnasio...
pude vera la mujer
de Kandia
y en sus manos,
de la cooperativa obrera
cinco bolsas.

Todos ellos
(mis vecinos)
me han visto,
aunque no tienen
el deseo irrelevante
de escribirme.


Nosotros

Fuman
cuatro nosotros
en un encierro sin decírnoslos.

Detrás de Rojitas ventanas rojas
una rata de uvas blancas ratera
columpia el ni se mueven habitual
de yertos culos nuestros.

Se hace pocosa la noche
cuando hay que volver
al ni se sabe
después de salidos de donde
para martes vernos.

Devolvámonos a la palabra
que el silencio se hartazgó de ellas.



Germán Arens
Argentino
Extraído del Blog personal del autor “El cosmosurero.blogspot.com”

Poeta, músico, fotógrafo y pintor-
Publicó dos libros de poesía: "Pueblada" Ediciones en Danza(2008) y "Versos de Gabino" El Suri Porfiado"(2009). Y lleva adelante además el blog www.poetasaltuntun.blogspot.com donde difunde la obra de poetas argentinos.

  Mabel Stricker

28 de agosto de 2010



Poeta
a Marcos Silber

Danza
gira cae
y otra vez

danza
se eleva
y volutas otra vez
la palabra del poeta
compone su tango
con la eterna

gira y cae
cae y se levanta
desgrana gotas
y dice

dice de ocultas voces
tan claro
al viento
dice de humedad
lujuria
dice de tiempos nietos
dice el poeta

casca su voz
que danza contra los muros

hondo resuena
donde ninguna
dejara de oírlo

salpica el poeta su espuma
tan con otros ojos

los que se van lo llevan
abrazado

así su voz sigue
danza
gira
se eleva
sobre los adoquines

y amanece



Mabel Stricker
Argentina

Nacida en Ciudad de Bs. As. en un 7 de septiembre .
Estudió Psicología y Publicidad en los #70. Actualmente cursa la licenciatura en Ciencias Sociales en la Universidad de Quilmes.
Desde 1995 participo en sucesivos talleres literarios a cargo de maestros como Carlos Patiño, Alicia Grinbak, Marcos Silber, Patricia Aliberti, etc.
Obtuvo numerosos premios por su labor literaria, tanto en narrativa como en poesía y dramaturgia( Circulo Médico de Quilmes, Biblioteca Moreno de Bernal, Feria del libro de Gáiman, Municipalidad de Alte. Brown, Circulo Médico de Lomas de Zamora, etc.)
Publicó en diversas antologías en Montevideo, y Brasil (Bilingüe). Y otras de gestión propia “Siete de Mente” en Montevideo, “Caras Máscaras y Caretas”, “De pasos , escalones y fantasmas”, en poesía y “Delirios y otros Síntomas”(cuentos).
Participó en diversos encuentros de escritores en Uruguay, Gualeguaychú, Gaiman, Bernal, etc.

  Eugenia Cabral

27 de agosto de 2010




AIRE


ROSA MISTICA, Torre de David,
jugando con piedrecitas sobre baldosas
recalentadas por la siesta,
el gran frescor del jazminero es hondonada
secreta,
el barco mueve las aguas del horizonte,
pero sigue aquí, cabeza baja,
el juego transita por la cólera a causa
del barco- que no cesa de mover el
horizonte-;
no has venido a mí (más malvado que
Dios, el que siempre está mirando)



Eugenia Cabral
Córdoba 1954

Dirigió la revista IMAGINERA - desde 1991 a 1993.
Ha coordinado el Taller Literario para la Tercera Edad, con cargo docente, en la Facultad Regional Córdoba de la Universidad Tecnológica Nacional 1994. Colaboró en el suplemento literario de la voz del Interior del 1993 al 2000. Ha publicado en antologías nacionales y en publicaciones de América Latina


“El buscador de soles”, poemas, Editorial Municipal de Córdoba (1986), “Poesía
actual de Córdoba- Los años ‘80”. Selección y prólogo. Publicado con auspicio del
Fondo Nacional de las Artes. Ediciones Mediterráneas(1988), “Iras y Fuegos – Al
margen de los tiempos”. Poemas en prosa. Ediciones Último Reino. Buenos Aires,
(1996), “La almohada que no duerme”. Relatos. Ediciones Del Boulevard. Córdoba,
(1999) y “Cielos y barbaries”, Poemas. Alción Editora. Córdoba. (2004).


Obra: "In Search of Sea" Rob Gonsalves - 1959 Toronto

  Cristina Peri Rossi

26 de agosto de 2010




R.I.P.


Ese amor murió
sucumbió
está muerto
aniquilado fenecido
finiquitado
occiso perecido
obliterado
muerto
sepultado
entonces,
¿porqué late todavía?


de "Inmovilidad de los barcos" 1997



La invenciòn del lenguaje


Ebrias de lenguaje
como antiguas bacantes
borrachas de palabras
que endulzan o hieren

pronunciamos las palabras amadas
-carne, voluptuosidad, éxtasis-
en lenguas diversas –joie, gioia, happiness
y evocamos el goce y la dulzura
de las antiguas madres
cuando balbucearon
por primera vez
los nombres más queridos

Las madres
que bautizaron los ríos
los árboles las plantas
las estrellas y los vientos

que dijeron ultramar
y lontananza


Las madres que inventaron nombres
para sus hijas y sus hijos

para los animales que domesticaron

y para las enfermedades de los niños

que llamaron cuchara a la cuchara
y agua al líquido de la lluvia

dolor a la punzada de la ausencia

y melancolía a la soledad


Las madres que nombraron fuego
a las llamas
y tormenta a la tempestad


Ellas abrieron sus carnes para parir
sonidos que encadenados formaron palabras
la palabra cadena
y la palabra niebla

la palabra amor
y la palabra olvido

Saben
desde el comienzo
que el lenguaje
es grito de la voz que se hace
pensamiento
pero nace, siempre,
de la emoción
y del sentimiento.




Cristina Peri Rossi
De Habitación de hotel (Plaza&Janés, 2007)

Nació en Montevideo, Uruguay el 12 de noviembre de 1941 y durante la dictadura en su país, al igual que muchos intelectuales se vio obligada a exiliarse. Vive en España desde 1972.

Estudió música y biología y se graduó en Literatura Comparada. De su obra poética destacan “Evohé” (1971), “Descripción de un naufragio” (1974), “Diáspora” (1976), “Europa después de la lluvia” (1987), “Babel bárbara” (1991), “Otra vez Eros” (1994), y “Aquella noche” (1996). Ha sido merecedora de numerosos premios, entre ellos el Loewe de poesía en 2008 por su libro “Play Station”, el Ciudad de Torrevieja en 2007, el Rafael Alberti en 2003, y muchísimos más por lo que es considerada como una de las mayores autoras uruguayas del siglo XX.

  Jorge Campero

25 de agosto de 2010




Adorado perro
Perro mío
El de las enormes preguntas
Esta noche
Uno de los dos va a llorar
Ojalá no sea yo


De "Jaguar Azul" 2002

* * *


Dama de mi catre
Carne de mi tigre
Ud. ud. y solamente ud.
Por la que me relamo
Los bigotes
No sé qué hago asoleando
el desteñido añil


De "Musa en Jeans Descolorido" 2001

* * *


Piedra fría sin respuesta
Tú eras
la que daba de beber
agua a los bueyes
o apagaba las luces
a los caracoles
o dabas de comer
guayabas a los papagayos


De “Árbol Eventual" 1984


Jorge Campero
Nació en Bolivia en el año 1947, recibió dos veces el Premio Nacional de Poesía Yolanda Bredegal, por sus libros Musa en Jeans Descolorido, en 2001, y Jaguar Azul, en 2002, reeditado este año por la editorial argentina Alción.

  Ricardo Zelarayán

24 de agosto de 2010




La piedad por "Esas imbéciles moscas"
a Oscar Masotta


No es por decir,
pero el Papa,
sí, el Papa,
es una Batata.
Mejor dicho era una Batata
porque más bien era un topo,
un topo topológicamente ubicado en el ombligo del mundo.
Al ombligo del mundo le creció un hongo,
enorme y blanco,
que cuando el agua le sube al cuello
hace glu! glu!
y sonríe,
sonríe como Hawai,
como Samoa,
y como todas las islas felices perdidas en este mundo.
El Papa topo (o ex topo)
no es la vizcacha que se escapa de la topadora
o la lombriz cortada con la pala
que sigue vivita y coleando.
El Papa añora los yuyos del Vaticano,
pero ahora se va pal lao del monte
con el diario doblado en cuatro bajo el brazo,
el diario que doña Remigia
busca desesperada para prender el fuego.
"No hay fuego doña Remigia
sin diario doblado en cuatro
bajo el brazo del Papa que se fue al monte."
Doña Remigia patea la radio
con sus zapatos amarillos.
La radio no larga prenda...
"Doña Remigia yo sé
que después de pelar una naranja
no hay nada mejor que pelar un canguro
australiano y papal,
o un yacaré recién salido del agua
y bien atajado.
Rapidito que hay que hacerse tiempo
pa patear la radio!"
Qué quiere que le diga,
dice doña Remigia,
la Lucinda tiene la lumbriz,
la Rosa la hurmiga
y la radio no anda...
¿Qué le parece?
"Doña Remigia,
la vida pende de un hilo del corazón...
Usted se quedó sin fuego.
El fuego siempre tiene la última palabra...
insondable, acariciada,
pero hay que hacer cola.
La cola del pobre yacaré
pelado y colgado."
El Papa vuelve con los ojos hundidos.
El Papa vio pasar la última liebre pero no la corrió.
El Papa se mete en la cocina sin fuego,
sin el diario
y con la radio pateada en el suelo.
¿Y la Remigia?
Doña Remigia anda por ahí
con los zapatos amarillos
subida en un burro
corriendo un sapo.
El sapo se agiganta,
la vieja se asusta.
(no tanto como el burro).
El sapo ve crecer los hongos y respira...
Ha comenzado la lluvia.
La lluvia cae sobre la vieja sin fuego,
sobre el burro empacado
y sobre los zapatos amarillos que patearon la radio.
Justo por ahí,
donde está el burro empacado,
anduvo hace rato la Rosa,
la de la hurmiga...
que no hay que confundir
con la hormiga y la rosa
ni con la topadora y la vizcacha
ni con la tierra y la lluvia...
!Que llueva, que llueva...
la vieja no está en la cueva!
Y la pajarita Rosa voló
y ahora canta...
La ciudad en el crepúsculo comienza a encender sus mil ojos llovidos.
Los grandes cristales chorrean mansamente
y los autos acarician las calles mojadas.
Rosa voladora y cantora,
Rosa con la hurmiga.
La hurmiga que canta al oído
como la lluvia del cielo.
La canción me la guardo para otra ocasión.
La hora se sumerge como tiburón en las negras profundidades,
y no hay tiempo para la canción
ni para la discusión,
ni para el fuego que hubo que dejar para mañana.
Las uñas crecen como las moscas
y las moscas vuelan sobre la vida.



Ricardo Zelarayán
De: “La obsesión del espacio” (Poesía, 1973, reeditado en 1997)

Nació en Entre Ríos en 1940
Libros publicados: “La obsesión del espacio” (Poesía, 1973, reeditado en 1997); “Traveseando” (Cuentos Infantiles, 1984); “La piel de caballo” (Novela, 1986, reeditada en 1999 por Adriana Hidalgo); “Roña criolla” (Poesía, 1991); “Lata peinada y otros escritos” (Ed. Argonauta. 2008); “Ahora o nunca” (Poesía Reunida. Ed. Argonauta 2009)